A través del tiempo la ciudad de Burgos ha presentado una tendencia de crecimiento de Poniente a Oriente. Principalmente condicionado por barreras naturales y creadas como son el Rio Arlazon, las Murallas, la vía del Ferrocarril y mas actualmente, la Ronda Sur (Madrid- Irun). Una tendencia marcada por el paralelismo de estas y la ubicación de la zona industrial hacia el oriente de la cuidad. De esta manera la ciudad fluye y se relaciona de forma natural en este sentido, sin embargo de Norte a Sur sus circulaciones son escasas y poco eficientes. Debido a ello, el ayuntamiento al reubicar la Vía del Ferrocarril, propone una mayor permeabilidad y fluidez que no existían mejorando la calidad de vida de los ciudadanos .La caída de esta barrera saneara el ámbito de actuación con una dinámica totalmente diferente. Alrededor de este vacio las posibilidades queda abierta: los barrios colindantes se comunican, los paseos al parque de la quinta son mas largos , el paisaje se transforma.