“La auténtica esencia de la arquitectura consiste en una reminiscencia variada y en desarrollo, de la vida orgánica natural. Éste es el único estilo verdadero en arquitectura”
Alvar Aalto
Villa Mairea, Noormarkku, Finlandia (1938 – 1939)
© Alvar Aalto Museum, Jyvaskyla, Finlandia
Foto: Gustaf Welin
Todo arquitecto tiene un estilo propio, este “estilo” es el que rige cada uno de nuestros diseños y es una especie de sello que tenemos a la hora de proyectar. Alvar Aalto no es la excepción, él tiene un pensamiento o “estilo” muy definido el cual se ve en cada una de sus obras. Sin embargo, cada una de sus obras tiene ese “algo” especial que las hace únicas. Al estar analizando las obras de Alvar Aalto me pude dar cuenta de este “estilo”.
Al analizar sus obras, estuve en mayor contacto con Mairea. La villa Mairea, es una casa hecha para Hary y Maire Gullichsen, en Noormarkku, Finlandia (1938-1939) en donde Aalto pudo realizarla de la manera que el quiso dado a la libertad que le dieron los clientes.
La relación que está (Villa Mairea) tiene con su entorno es impecable. Esto se ve ya que al estar esta villa rodeado de árboles nunca pierdes el sentimiento de estar en un bosque, debido a que no solo usa troncos en el exterior para formar un muro que representa un ‘bosque’, sino que este sentimiento lo continua hasta el interior creando en las escaleras otro ‘bosque’ con columnas de madera.
Con esta obra entendí la gran importancia que tiene Aalto como arquitecto, ya que las ideas que siempre tuvo, me parecen muy innovadoras para su tiempo. La comprensión que tenia del espacio, la naturaleza y la comunicación que había entre cada uno de los espacios tanto interiores como exteriores es algo que en lo personal me impresiona, debido a la época en la que se realizaron todas sus obras. Bien podría pensar que muchas de sus obras, en especial pensando en Mairea, pudieran estar construidas en esta época.