Durante el curso de “arquitectura en red” en la Universidad Iberoamericana en su modalidad de verano 2010, se propuso estudiar dos de las mas importantes obras en materia de vivienda social en nuestro país; el Conjunto Habitacional Miguel Alemán y la Unidad Habitacional Benito Juarez. La estrategia para el analísis de las célebres obras del arquitecto Mario Pani fue la del redibujamiento de los proyectos a través de modelos tridimensionales. El reto en la elaboración de los modelos fue coordinarnos dentro de grupos de 15 personas par armar el conjunto en colaboración simultanea por medio de archivos digitales referenciados. Al término de la construcción del modelo, nuestro conocimiento adquirido sobre la conformación original del conjunto Benito Juarez previa a su parcial derrumbe, nos dio la posibilidad de identificar muchas de sus virtudes y sus problematicas medio siglo después de su concepción.
Una posible deficiencia del conjunto que deriba en problemas relacionados con la convivencia social, es la escala del mismo. El problema surge de la inherente cualidad de ultra densidad de esta tipología cuya eficiencia en aprovechamiento espacial demanda conjuntos de gran escala. La disposicion del proyecto provee a sus habitantes de grandes extensiones de espacio verde, sin embargo, la carencia de elementos que contengan estos espacios y permitan al usuario ubicarse en lugares delimitados, han dejado espacios de nadie cuya vocación no ha sobrevivido el paso del tiempo. Se propone sacrificar parte del area verde para construir un centro cultural, comercial y deportivo, afin de contener espacios en contraposición con la vivienda. Los habitantes podran adueñarse de estos limbos al mediar el contacto de los edificios con las grandes explanadas.
El star System Aproach
Aprovechando la libertad de diseño que ofrece un curso de esta naturaleza, decidí explorar el problema del lenguaje arquitectónico y el papel que este juega en utilidad de una obra. ¿Puede una obra funcionar de igual manera si es llevada a cabo con dos lenguages arqutectónicos diferentes? ¿Qué tanto peso tiene el lenguage en el valor de la arquitectura?. En cuestión de estética, tomé la arbitraria decisión de abordar el problema de la forma con la finalidad de llegar a un resultado plástico afín a a la línea de una célebre arquitecta ganadora del premio Pritzker. Escusas para justificar una forma siempre sobrarán, y en este caso se logra a través de un contextualismo físico basado plenamente en el grafismo que permite la respuesta directa a la traza del contexto. Lo que interesa es imaginar la forma en que la globalización de la arquitectura pone a disposición como respuesta a los problemas locales un lenguage internacionalmente cotizado. Intervenir un contexto de valor histórico es una tarea sumamente dificil y en este marco de discusión entre conservadores y alborotadores, el tema central parece ser casi siempre el problema del lenguage arquitectónico. ¿Es válido que un arquitecto deje su individual sello en un contexto de esta naturaleza, o debe subordinarse al peso histórico? La pregunta de fondo es si debe el lenguage ser el tema central de la discusión o debe valorarse la arquitectura por las situaciones que provoca. Debemos repensar que en materia de lenguage jamás se dara gusto a la crítica en general, que a traves de una estrategia reduccionista plantea los caminos de la adaptación o el contraste absoluto. Finalmente se debe abolir la noción de la llegada mesiánica de las forma arquitectónicas internacionalmente cotizadas como solución a los problemas que tienen que var mas con la dimensión humana y la indentidad de una comunidad.
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