Hacer este espacio subterráneo implica un incremento considerable de usuarios a la plaza y el hecho de planear accesos a éste en la plaza misma logra hacer que la gente recorra el espacio.
La propuesta a grandes rasgos se divide en dos, lo que está a nivel de banqueta y lo que está debajo. En la parte inferior propongo un estacionamiento ya que los cercanos siempre están saturados y hay necesidad de espacio de aparcamiento. Este espacio lo propongo público para que sirva a aquellos que van a cualquiera de los edificios que rodean la plaza y posiblemente algunos cajones apartados para oficinistas de la zona.
Esto nos lleva a la segunda parte de la propuesta, que es el espacio cultural. Dado que la plaza es en realidad una plancha sin uso, pienso que continuar con la idea del recorrido cultural que ya existe en la banqueta de reforma puede llegar a esta plaza y concretarse en algo más formal y con mas flexibilidad para albergar las propuestas de arte. Debe ser un espacio abierto y amplio para que pueda ser modificado y adaptado a las necesidades específicas y estas características las tiene esta plaza por lo cual creo que es una solución práctica y eficaz.